SOBRE MI

La relación con nuestro cuerpo, nuestros pensamientos y emociones siempre ha sido un tema que me ha fascinado. Siempre he considerado el cuerpo físico como una manifestación de toda la información que se procesa por dentro y de cómo todo lo que nos sucede afuera en nuestro entorno y en nuestros vínculos con los demás, no es más que una proyección de lo que vivenciamos dentro de nosotros.

En mi adolescencia cavilaba: “¿Cómo puede ser que cuando me siento así tan cerrada, tímida y pequeñita, mi cuerpo pueda reaccionar cerrándose y bloqueando de ésta forma la energía? A veces, me veía desde afuera, como si yo no fuera esa niña que sentía y reflexionaba. Y otras veces meditaba: “¿Cómo puede ser que el cuerpo se expanda y se abra tanto y la energía fluyera, en algunos momentos dónde me volvía a sentir conectada y segura?”. Esas reflexiones me pasaban por la cabeza, casi constantemente. Pero durante muchos años no hice nada al respecto. Sufría. Pensaba que no había posibilidades de cambiar e imprimí en mi cuerpo patrones de tensión, rigidez, reacción y dureza. En esa etapa de mi vida, nunca habría imaginado la transformación tan profunda que me esperaría al descubrir filosofías como el budismo o el yoga y técnicas como la meditación o la respiración.

El conocimiento o la consciencia de que nuestro cuerpo está formado por varias y distintas capas (físicas y energéticas o vibracionales) también me ha ayudado a comprender lo fundamental de trabajar el cuerpo sin excluir ninguna de ellas. Y que están conectadas entre sí.

Uno de los aspectos de la medicina china que desarrollamos en las prácticas de yoga es el de volver a conectar con nosotros mismos, a un ritmo que sea el nuestro propio, con el corazón disponible y generando autonomía y auto responsabilidad. Entonces empezamos a hacernos cargo de nuestra propia salud.

Por lo tanto, el yoga contribuye a mejorar la calidad de nuestra salud.

El Cuerpo humano es un reflejo de la propia mente que habita el cuerpo

Inicié el camino espiritual durante mi infancia aprendiendo a tocar un instrumento (el piano) que me llevó a conectar conmigo misma a través de la vibración de la música. También aprendí a sentirme mejor en mi cuerpo a través de la danza y el movimiento, la voz y el sonido en las clases de teatro y canto. En aquellos tiempos, tenía muchas dificultades para relacionarme con los demás. Tenía el corazón muy cerrado y mi tendencia era la huida y la falta de presencia y de arraigo. Me sentía muy desconectada de mí misma y vivir era toda una frustración. Sobrevivía. Iba tirando. Lo mejor que podía. Sufría de asma y, a menudo, me torcía los tobillos. Me costaba horrores integrarme en los grupos y, a menudo, me apartaba pensando que no era digna de ser amada. Me pasé así mucho tiempo, años. Vivía la soledad con dificultades y tristeza.

La presencia y la apertura en el Cuerpo

Hasta que un día descubrí la danza y el movimiento que me permitieron liberar algunos bloqueos y tensiones que residían en mi cuerpo físico. Bailar y mover el cuerpo y poder expresarlo fue para mí cómo una medicina, una vía de escape para expresarme. Conseguí transmutar algunas inseguridades y miedos. Hice un intento de dejarlo todo y vivir exclusivamente de la danza contemporánea. No obstante, a los 28 años y afrontando todas las dificultades que se presentaron durante mi estancia de 5 años en París, sentía que el baile no era suficiente para sanarme. Así que empecé a indagar en la filosofía budista, a practicar la meditación con mantras (sentía que el corazón se me abría al pronunciar aquellos mantras, me hacían vibrar y ahí conecté con la sensación de pertenencia y de no dualidad ni separación). Inicié mis prácticas en la disciplina del yoga y la vida me dio la oportunidad de emprender éste lindo camino dando algunas clases de yoga. El yoga me encontró a mí y yo lo acogí con todo mi ser. Ahí empieza mi vínculo inseparable con ésta maravillosa disciplina milenaria.

Los idiomas siempre han sido apasionantes para mi. Los acentos, las canciones y vibraciones que emanan cada uno, sin perder su propia esencia, siempre me han fascinado. Este año, en relación a ésto, he dado con una técnica maravillosa de sanación a través del sonido que enseña Alejandra Ortiz (llamada Almunis) y que es maravillosa para integrar sus principios de trabajo en las prácticas que acompaño.

Hablo y entiendo de forma fluida el idioma francés (país donde estudié durante 2 años y donde viví 5 años) aprendí inglés de muy pequeña (aunque después lo perdí y tuve que estudiarlo más tarde) y hablo y escribo perfectamente español y catalán. Pronto me gustaría aprender italiano o portugés.

Muy pronto voy a aprender e integrar la técnica de Breathwork con Catalina Rojas que llevo practicando desde hace pocos meses.

Técnica

“El cuerpo físico es como un mapa que nos transmite cierta información”

Qué ofrezco. Qué metodología o qué práctica ofrezco
La presencia en el cuerpo

El propósito es desarrollar una práctica de Yoga que fomente un cuerpo presente, despierto y disponible que sea capaz de gestionar todos los desequilibrios internos. En un cuerpo trabajado con consciencia, escucha y respeto, hay interacción en todas las partes del cuerpo. Cuando conseguimos practicar con ese enfoque, el cuerpo expresa salud, fortaleza, equilibrio y armonía y, simultáneamente, presencia.

A través de los ajustes y las acciones en las posturas, tomamos responsabilidad de nuestro propio cuerpo, aprendemos a auto gestionarlo, a sanar los dolores y a sentir las lesiones como espacios de aprendizaje.

El Yoga es para todos los seres humanos. Todo el mundo puede practicar yoga, sin excepción. Justamente, la práctica que acompaño es una bonita herramienta para personas con lesiones, dolores y dificultades. Siendo, además, muy efectiva para personas entrenadas y saludables que desean aprender y prosperar en el aspecto físico, mental y espiritual, generando estabilidad mental o enfoque.

A nivel Biomecánico: Es el trabajo con la estática, la fuerza y el movimiento en la postura. El foco es generar un equilibrio del cuerpo físico cuando estamos en reposo o en movimiento.

La permanencia activa en la postura o asana desarrolla un estado de atención, especialmente al principio. La presencia viene de éste estado de atención a través del cual el cuerpo desarrolla unos mecanismos que son los de estar alerta o aprender a escucharse, a sentirse.

Vendría a ser un trabajo profundo de la postura formado por secuencias de yoga más estáticas y otras más dinámicas.

El yoga como herramienta para romper con los condicionamientos físicos

Creo profundamente que el cuerpo físico es un reflejo de nuestra historia de vida y que, absolutamente todos, tenemos el potencial de cambiar nuestras tendencias o esos gestos que se han ido asentando. Para el cambio solo se necesita atención, decisión, constancia y disciplina. Es una cuestión de foco.

Nuestro cuerpo físico no es más que un vehículo a través del cual se manifiesta toda la información en diferentes niveles de conciencia. Alrededor de nuestro cuerpo físico tenemos nuestro cuerpo vibracional que es como una membrana que contiene toda la información e impresiones. Trabajar en el cuerpo frecuencial es prioritario en las prácticas que enseño.

Hay muchos cuerpos que tienden a la rigidez. Son cuerpos que están anquilosados y tensos. A menudo se presentan personas con hombros tiesos, espaldas rígidas, caderas rígidas, espaldas encorvadas, pechos cerrados. Suelen ser personas con dificultades para respirar correctamente, para relajarse, conectar con ellas o, simplemente, estar presentes y disponibles.

El Yoga que transmito es un yoga que viene a romper esos condicionamientos y esos gestos, desarrollando cuerpos abiertos, flexibles, presentes y disponibles(eso se consigue a través de la práctica). Aprender o volver a recordar cómo habitar el cuerpo es imprescindible.

¿Qué estilos de yoga practicamos en las clases?

El Yoga solamente es uno, puesto que es una experiencia hacia el interior de uno mismo. Es una práctica de autoconocimiento que nos ayuda a estar más sanos sin necesidad de tanta medicina química. Nos enseña a respirar y a calmarnos, a autogestionarnos, a sanar lesiones o desequilibrios y a ser mejores personas.

El Yoga que conozco más en profundidad y que enseño, no es más que una manifestación de lo mismo. No obstante, para los que descubren el yoga por primera vez, se trata de una práctica que afina en los ajustes y las acciones de las posturas para alinear los huesos a través de las acciones musculares. Así mejoramos la postura, calmamos el sistema nervioso, equilibramos el cuerpo físico, mental y energético. También acompaño prácticas de yoga terapéutico, Yin Yoga considerando aspectos de la medicina tradicional china, yoga dinámico y potente y prácticas suaves y relajantes con la respiración.

Yoga para deportistas:

  • Prevención y recuperación de una lesión
  • Rendimiento de una disciplina física o corporal
  • Surf
  • Escalada
  • Corredores, etc…

Yoga para prevenir y recuperar lesiones

  • Artrosis
  • Artritis
  • Pubalgia
  • Epicondilitis
  • Dolores de espalda
  • Dolencias de cadera, etc…

Yoga para calmar el Sistema Nervioso y para obtener salud física y mental

  • Yoga Terapéutico
  • Hatha Yoga
  • Yoga con ajustes y soportes
  • Yoga dinámico

Actualmente

Actualmente vivo en Lanzarote, aunque amo apartarme y estar en contacto con la naturaleza, todo lo que puedo. Actualmente y desde hace más de 5 años, integro el equipo de profesores de yoga en “Arsenal Femenino” en Barcelona, donde enseño yoga a distintos niveles.

Ofrezco clases particulares a domicilio, espacio dónde aprovecho para trabajar de forma más personal. Se trata de un trabajo más terapéutico, donde integro mis conocimientos de biomecánica con personas que sufren de dolores físicos, lesiones e incapacidades que les impide integrar una clase grupal corriente. Las prácticas las acompaño de soportes y material para que el alumno consiga practicar todas las posturas que le ayudan a recuperarse de las lesiones, generando una memoria celular en el cuerpo y aprendiendo a desarrollar más autonomía. Es decir, que terminan siendo clases más terapéuticas. En las sesiones introduzco también algunas meditaciones y técnicas de respiración para erradicar bloqueos y memorias que nos impiden avanzar en nuestro camino personal. No solo eso sinó que se trata de que la persona pueda conectar con su potencial y volver a recuperar un estado de equilibrio emocional, físico y psíquico.

Igualmente, doy clases de yoga a los trabajadores de algunas empresas privadas como la Editorial Penguin Random, donde integramos prácticas de asana, respiración y meditación. Ofrezco, conjuntamente, clases de yoga privadas y particulares online. Estas últimas me han sorprendido dada la capacidad que tienen de transmitir o de llegar desde casa y a través de la cámara. Son muy potentes y recomendadas. Nos ahorran tiempo y nos permiten seguir practicando a pesar de las circunstancias.
Organizo y enseño en retiros de yoga, jornadas y talleres enfocados en la salud y la práctica de asana y otras técnicas terapéuticas junto con mi Sangha.

También doy algunas clases puntuales en centros de yoga como Tattva Yoga o Om Lines en Barcelona. Son un verdadero goce y los espacios (bien acondicionados) son un regalo para conectar con el silencio y la quietud.