Yoga Iyengar: Yoga con soportes
Llevo más de 10 años practicando éste linaje y ésta disciplina con diferentes maestros como Usha Devi o Angelo Cecchi.
A través de ajustes y acciones en las posturas, tomamos responsabilidad de nuestro propio cuerpo, aprendemos a auto gestionarlo, a sanar los dolores y a sentir las lesiones como espacios de aprendizaje.
Este estilo de yoga nos enseña uno de los principios más importantes de la medicina china que es el de convertirnos en médicos de nuestra propia vida. Adquirimos autonomía, nos auto responsabilizamos de nosotros mismos, aprendemos a ajustarnos en la posturas, a sanarnos y a vivenciar las lesiones como espacios de aprendizaje.
Son prácticas que requieren de mucha atención y concentración en la interacción de las diferentes partes del cuerpo. Trabajamos la permanencia o la capacidad de estar más tiempo en las posturas. Eso contribuye a reforzar nuestro estado de concentración y de atención. Desarrollamos una cierta sensibilidad y aprendemos a vivir y a habitar nuestro cuerpo.
El uso de material es fundamental en éstas prácticas, especialmente para las personas que llevan menos tiempo practicando. Nos da un sentido de dirección y permite que podamos practicar las posturas sin rigidez ni tensiones. El material que usamos son básicamente cinturones, bloques, mantas y bolsters.
El yoga es para todos. Todo el mundo puede practicar yoga, sin excepción.
En las clases me gusta mucho usar la palabra responsabilizarnos. Ponerle conciencia y foco a algo que estamos vivenciando. No esperar que la solución nos caiga del cielo, de nada externo a nosotros como el médico o las pastillas de la farmacia, la alimentación o los demás. Sinó que lo que hacemos es mirar de frente todas las dimensiones de nuestra propia vida. Y empezar a sanar.
Y, a partir del momento en que paras, observas, sientes y estás encima de la esterilla practicando, ahí ya está empezando a transformarse nuestra conciencia. Y empezamos a sanarnos.
Lo que hacemos es ponerle un poco de luz a lo que nos hace sufrir para que así aflore la alegría de vivir.
«El Asana es un trabajo con la estática en estado activo»

